Estoy devorando el último libro de Tom Peters (¡Excelencia ahora! Humanismo extremo) y no he podido resistir compartir alguna de sus ideas por aquí. Si ya has leído a Tom no te va a sorprender (es 200% Peters), pero es genial como recopilación. Y si no lo habías leído, ¡es una gran dosis de partida!
Además lo editan mis amigos de Empresa Activa (Ediciones Urano), con quien he publicado tres de mis obras cumbre 🙂
Felicidades Sergio Bulat (¡espero que nos veamos pronto!) por incorporar a Peters a la colección, porque es un lujo compartir estantería con Tom Peters, David Allen (he vuelto al GTD…), Simon Sinek, Tim Cook, Tim Brown, etc.
Te dejo algunos de los mensajes de Tom sobre la excelencia, que, como él dice, no es una «aspiración», algo a obtener en el largo plazo, sino que…
- La excelencia son los próximos cinco minutos (o no es nada en absoluto).
- La excelencia es tu próxima conversación de cinco minutos en el «pasillo» real o virtual.
- La excelencia es tu próximo correo electrónico o mensaje texto. Dame una muestra de los últimos 10 correos electrónicos de un líder y te daré una evaluación precisa de su carácter y eficacia.
- La excelencia son los tres primeros minutos de tu próxima reunión.
- La excelencia consiste en callar y escuchar, en escuchar de verdad o de forma «agresiva».
- La excelencia es decir «gracias» por algo «trivial».
- La excelencia es poner todo el esfuerzo posible lo más rápido que se pueda para responder a una «pequeña» metedura de pata.
- La excelencia es aprender los nombres y el año escolar de los 14 hijos de los miembros de tu equipo.
- La excelencia es molestarse en aprender la forma de pensar de la gente de Finanzas (o de Almacén, o de Compras)
- La excelencia es preparar exageradamente una presentación de tres minutos.
Te contaré más cuando lo termine, pero de momento… ¡excelencia ahora! What else? Y tú, ¿qué vas a hacer con tus próximos 5 minutos?
Lo que estás haciendo ahora será el sello de toda tu carrera
Tom Peters

Ah! y si quieres una dosis extra de Tom Peters en 4 minutos (te sobra 1 de excelencia), aquí nos cuenta cómo la mediocridad es un fracaso de la imaginación (¡frase que he usado cientos de veces!), y cómo los negocios no son impulsados por los números, sino que son pasión, creatividad, compromiso, y entusiasmo. ¡Espero que te guste!