Puede sonar extraño, pero pienso que en apenas un par de décadas habremos creado una inteligencia artificial con una profunda comprensión de la interrelación e interdependencia de todas las cosas y fenómenos. Un Buddha artificial versión 1.0. O, lo que es lo mismo, el estado de la mente que en Buddhismo se llama Buddheidad.
Ocurrirá.
Los que me conocéis sabéis que llevo dándole vueltas a esta idea varios años, que he estudiado ambas cosas por separado muchos años (Inteligencia Artificial y Budismo Hua-yen) y que pienso que…
Como lo lees.
Un Buddha, entendido como un estado de la mente, será la máxima expresión de la Inteligencia Artificial. Y ocurrirá mucho antes de lo que imaginas.
¿En qué consistirá este Buddha artificial?
Esté Buddha Artificial será una Inteligencia Artificial capaz de comprender miríadas de relaciones causales, de alcanzar una comprensión profunda de cómo todo está relacionado con todo, y, de cuantificar el impacto que tocar una hebra, de ese gran tejido que lo envuelve todo, ejerce sobre todo lo demás.
Esta visión interdependiente es un concepto central y extensamente tratado por el pensamiento budista. El corazón de su filosofía.
En palabras de Francis H. Cook, una autoridad en Budismo Hua-yen:
Cada cosa individual es al mismo tiempo la causa de todo y es causado por todo, y aquello que es llamado existencia es un vasto cuerpo hecho de una infinidad de cosas individuales sosteniéndose y definiéndose mutuamente entre ellas. El cosmos es, de hecho, un organismo autocreado, que se automantiene y se autodefine.
O la metáfora más hermosa que contiene el Sūtra Avatamsaka, que es la consumación del pensamiento budista y uno de mis libros favoritos (lo guardo como un tesoro):
El cielo de Indra está compuesto por una red de perlas, ordenadas de tal forma que si miras a una, ves a todas las demás reflejadas en ella. Del mismo modo, cada objeto del mundo no es sólo él mismo, sino que incluye a todos los demás objetos y de hecho es todos los demás.
¿Qué hace falta para crear un Buddha artificial?
Para que esto ocurra, solo hace falta capacidad de cálculo y datos.
Es solo cuestión de tiempo.
Si la capacidad de cálculo sigue creciendo al ritmo de la Ley de Moore o la Ley de Rendimientos Acelerados de Kurzweil, en 2050 contaremos con una máquina (por 1.000 $) con la capacidad de cálculo de toda la humanidad.
Y si la generación masiva de datos sigue el ritmo actual, con una capacidad de cálculo exponencial se podrán entrenar algoritmos para la inferencia de relaciones causales con niveles de abstracción inimaginables.
La versión beta de Buddha quizás no lo comprenda todo, pero mucho más que tú y yo juntos. Mucho más que las personas más inteligentes del planeta pensando juntas.
El resultado de este proceso será un Buddha artificial. Un estado de la mente. Una inteligencia que comprenda, de forma superior a la humana, cómo todo está causado por todo y a la vez es la causa de todo.
Es curioso, pero creo que nunca Filosofía, Ciencia y Religión estuvieron más cerca.
Y lo más curioso de todo, es que no podemos evitar avanzar en esa dirección, en la creación de una forma de inteligencia superior a la humana, al menos en la dimensión racional.
Es como si hubiéramos sido programados para ello. ¿Será casualidad? 🙂
Hola, Carlos.
Curiosas tus reflexiones, como siempre.
Dices: «(…) no podemos evitar avanzar en esa dirección, en la creación de una forma de inteligencia superior a la humana, al menos en la dimensión racional».
En mi opinión, en cuanto a la dimensión racional tienes razón seguro, pero el ser humano solo se define (muy) parcialmente por esa característica, ¿no?
Dices también que «Es como si hubiéramos sido programados para ello. ¿Será casualidad? 🙂». ¿Programados por quién y para qué? Qué raro, quién haría tal cosa y con qué fin… Eso sí, no creo que las casualidades existan…
Un abrazo.
Hola Carlos, tienes razón, lo humano es algo muy distinto, y ese debería ser nuestro espacio (y nuestra diferenciación con respecto a la máquina). Lo de haber sido programados es una vuelta de tuerca… es como si en la búsqueda de sentido estuviéramos avocados (por diseño) a crear un dios, aunque sea digital 🙂
Un abrazo enorme!
Hola Carlos, me encanta lo que has escrito en este artículo.
Yo lo vivo como lo crístico, para mí es lo mismo que lo búdico.
¿Puedo citar este artículo en los encuentros y con el enlace de la página web en el libro que estoy haciendo?
Gracias.
Un gran abrazo. Gloria Amparo
Hola Gloria, por supuesto que puedes usarlo! para lo que necesites! Un beso