Lo que empezó como una declaración de intenciones y fue tomando forma en casa del doble de Mario Bross 🙂 se convirtió en realidad este sábado, en una fiesta mítica que duró desde el mediodía hasta la madrugada, ¡como en los viejos tiempos!
Han pasado 21 años, el tiempo se nos va notando (a unos más que a otros), las coletas/melenas ya están en retroceso, en muchos casos en retirada y la mayoría de nosotros nos convertimos en personas mayores, con familia y algunas enfermedades de burgués, como la presbicia o la alergia al cacahuete 🙂
Pero este sábado, en Cáceres, la preciosa ciudad donde la mayoría de nosotros nos conocimos, fue como un viaje en el tiempo, como si todos tuviéramos 20 años de nuevo, como si no hubiera pasado un minuto desde que nos separamos.
A veces tenía la sensación de que si me miraba a un espejo tendría la chilaba puesta o mi camiseta del indio 🙂
¡Disfruté muchísimo y me encantó veros a todos! ¡GRACIAS al «equipo aborigen» por la organización!
Espero que no tengan que pasar tantos años para encontrarnos de nuevo y que podamos liar alguna juntos. Por cierto, mi propuesta para liarla parda sigue en pié, de momento hemos empezado por la fiesta, ¡que no es un mal comienzo!